Browsing by Author "Henríquez Urrutia, Marlene"

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    Role of circadian regulation in the mycoparasitic interaction between Botrytis cinerea and Trichoderma atroviride
    (2020) Henríquez Urrutia, Marlene; Larrondo Castro, Luis Fernando; Pontificia Universidad Católica de Chile. Facultad de Ciencias Biológicas
    Aun cuando los genes que componen el oscilador circadiano se pueden encontrar en numerosos hongos, durante años, la investigación sobre relojes circadianos se ha centrado en Neurospora crassa, habiendo apenas escasa descripción fenomenológica de ritmos en otros hongos. Sin embargo, ninguno de esos estudios ha demostrado la presencia de un oscilador circadiano funcional, como en N. crassa, exceptuando Hevia et al., 2015, que mostró un reloj circadiano funcional en Botrytis cinerea, y su influencia en virulencia. Las especies de Trichoderma son conocidas por su actividad de biocontrol contra patógenos de plantas, en los que varios mecanismos como la competencia de nutrientes, la secreción de CWDE, el metabolismo secundario y el micoparasitismo actúan en sinergia. T. atroviride también ha sido estudiado por sus respuestas a daño mecánico, lo que permitió establecer un modelo de regeneración en hongos, así como también por sus respuestas a luz azul y la descripción de BLR1 y BLR2: los fotorreceptores y factores de transcripción homologos a WC1 y WC2 de N. crassa, y que forman parte del oscilador central. Dado que el genoma de T. atroviride codifica para un homólogo de frq de N. crassa, tafrq, se ha sugerido la presencia de un reloj circadiano hipotético en T. atroviride. A pesar de que todavía no se han observado oscilaciones ni un fenotipo circadiano, la presencia de los genes para los componentes del reloj en T. atroviride, nos impulsó a evaluar si realmente existe un reloj circadiano funcional en este organismo, y que pudiera estar regulando varios de sus rasgos fenotípicos característicos, como el micoparasitismo, programas de desarrollo y metabolismo secundario. Así, en este estudio, utilizando reporteros de luciferasa, mostramos por primera vez oscilaciones circadianas en T. atroviride, con un período cercano a las 26 horas en la oscuridad constante. Así también encontramos que los elementos centrales del reloj juegan un papel en la regulación de la conidiación, el metabolismo secundario y el micoparasitismo.